Facundo tiene 10 años y vive en San Patricio del Chañar, en Neuquén. Hace un tiempo se enteró que existía la Biblia Biper, con las ilustraciones del personaje que tanto le gustaba. En ese momento le pidió a su papá que le comprara una alcancía para ahorrar y poder comprar un ejemplar. Poco a poco, comenzó a llenarla de monedas y billetes y permaneció atento a la visita de la Sociedad Bíblica a su ciudad.
En diciembre se acercó a un stand de la SBA con su latita que había llenado con perseverancia e ilusión. Recibió un descuento especial y pudo llevarse su Biblia.
“La está leyendo y la lleva a la iglesia. Está feliz con su Biblia”, contó su mamá.