En la Biblia podemos aprender que es plan de Dios para nuestras vidas tener amistades genuinas. Si hay algo lejano a su verdadero propósito es que estemos solos, como islas. Por eso en la Biblia encontramos ejemplos, consejos e instrucciones para comenzar y mantener relaciones saludables y significativas que manifiesten la gracia de Dios:
El amigo siempre es amigo, y en los tiempos difíciles es más que un hermano. Proverbios 17:17
Para afilar el hierro, la lima; para ser mejor persona, el amigo. Proverbios 27:17
Nadie muestra más amor que quien da la vida por sus amigos. Juan 15:13
Quien con sabios anda a pensar aprende; quien con tontos se junta acaba en la ruina. Proverbios 13:20
Quien perdona gana un amigo; quien no perdona gana un enemigo. Proverbios 17:9
El buen amigo da buenos consejos; el malvado se pierde en su maldad. Proverbios 12:26
¡No se dejen engañar! Bien dice el dicho, que «Las malas amistades echan a perder las buenas costumbres.» 1 Corintios 15:33
Traten a los demás como les gustaría que los demás los trataran a ustedes. Lucas 6:31
Más valen dos que uno, pues mayor provecho obtienen de su trabajo. Y si uno de ellos cae, el otro lo levanta. Eclesiastés 4:9-10
Para alegrar el corazón, buenos perfumes; para endulzar el alma, un consejo de amigos. Proverbios 27:9
Entre risas, charlas y recuerdos, esta semana te invitamos a dar gracias a Dios por los amigos.